“Una de las formas primeras de ejercer la impunidad, es la invisibilización de la víctima. La victima deja de ser visible, esto es lo que ha pasado con los excluidos. Por eso se enoja tanto la clase media cuando le aparecen en las calles, porque, en realidad, el deseo sería: metamos la basura bajo la alfombra. Y mientras estén en la villa, no importa. El problema es cuando me aparecen en el medio de la ciudad…” Psic. Silvia Bleichmar

Si bien en Uruguay creo que no se intenta meter la basura bajo la alfombra, si creo que hemos ido en el camino de normalizar o de naturalizar si se quiere, ya que lo vemos en la cotidianeidad, esto de ver a cada cuadra una persona sin hogar. Que se ha vuelto una triste realidad del día a día y que todavía no han logrado las políticas para estos casos hacer frente del todo a esta situación tan grave.
Quiero con este articulo hacer una reflexión, y en cierto modo una autocritica como sociedad. De esto que vemos todos los días al salir de nuestras casas, deberíamos poner este tema también sobre la mesa ¿De quién es ese deber social sino de la sociedad entera, asumida por el Estado?
Este es un problema que no es de ahora, que esta inserto desde el crecimiento de las grandes ciudades y tiene que ver obviamente con las crecientes diferencias sociales, no de hoy sino desde hace mucho tiempo. En un discurso Baltasar Brum decía “Debemos al obrero no sólo el apoyo de leyes levemente protectoras, sino que estamos obligados a levantarlo con todas las fuerzas de la inferior situación económica e intelectual en que una mala organización secular lo tiene sojuzgado. No basta que nos preocupemos superficialmente de mejorar aquella situación; es menester que con tesón y entusiasmo suprimamos ese absurdo que permite que los obreros dediquen toda una vida de penurias al trabajo con objeto de obtener exclusivamente lo necesario para no morirse de hambre. Un principio de solidaridad nos obliga a cambiar fundamentalmente esa opresiva tiranía de un egoísmo suicida”. Y con esto implementó un Proyecto, sancionado el 10 de julio de 1916 con el nombre de “El derecho a los medios de vida” apoyado por Domingo Arena en la Cámara cuando dijo; “Que los medios de vida no se agotan en la comida necesaria para el sustento. El Estado está obligado a poner al alcance de los desamparados todo lo que sea esencial para sus vidas, eso esencial que no se limita al sustento diario. Es la función más augusta del Estado” buscaban entonces una política que llevara consigo la solidaridad frente al desvalido. Por eso el Estado debe atender todos los órdenes de la vida social, como también cuidar de los sin casa y sin tierra, para que tengan las condiciones de equidad. Es un deber social, contribuir a que todos puedan lograr esa finalidad, de vivienda, como de los otros medios de vida.
Esto es de relevancia actual, dado a que cada año en nuestro país aumenta significativamente las personas que viven en las calles, y a pesar de que el gobierno tome medidas, como por ejemplo el programa calle, o la instalación de más centros de alojamiento para éstas personas, no parecen ser suficientes, bastan ver la realidad, ir a Montevideo y ver una, dos tres personas durmiendo en la vereda por cuadra. Deberíamos tomar medidas mucho mas significativas al respecto y que no termine pasando lo que decía la Psicóloga Argentina, Silvia Bleichmar; que eso que tendría que ser una tarea del Estado, que es asistir a aquellos que están en situaciones precarias, es vivido como una tarea de caridad, a costa de los bolsillos de los pudientes, con lo cual, a la infamia de tener que asistir a seres humanos que están reducidos en su biosupervivencia, se agrega la infamia de considerar que eso es un acto de caridad y no una responsabilidad colectiva.
Excelente nota. Los batllistas debemos de promover todas aquellas medidas e iniciativas que refuercen el pepel del Estado solidario con los más débiles.